La especie humana siempre se ha preocupado en dejar su rastro espiritual en el disputado escenario por donde se ha movido, quizá como fórmula para garantizar un pequeño porcentaje de la inmortalidad que busca desde el inicio de los tiempos.
Las antiguas culturas se las arreglaban para que los que habían abandonado definitivamente el teatrillo mundano pudieran conservar cierta presencia en el artilugio que habían contribuido a montar. Los egipcios se inmortalizaban momificándose, los romanos vaciando mascarillas del rostro de sus muertos para garantizar la presencia de su espíritu en el hogar. En épocas medievales fue el registro de la silueta proyectada de la imagen del amado que partía hacia la guerra quien garantizaba el persistente destejer de su Penélope. No buscaban tanto la réplica de la imagen como mantener su espíritu –el contenido antes que el continente-.
Era el ‘aura’ que acompañaba al individuo quien permanecía en el lugar mientras hubiera alguien que quisiera recordarlo. Un halo intangible que quedaba latente en la escena, irrepetible en el espacio-tiempo, que paralizaba un instante de su presencia.
Con la aparición de las ‘máquinas seriadas de reproducir instantes’ el aura ha acabado choteándose, al convertirse en algo asequible a todos los mortales. Desde entonces cambian los paradigmas, se prostituye la imagen...
¿O quizá no?
Paul Valery reflexionaba en sus planteamientos con respecto al cuerpo atendiendo al mismo como: máquina articulada formada por una estructura esquelética accionada por músculos a través de un sistema nervioso...; también se refería a ‘mi cuerpo’ como pertenencia a algo interior intangible del que forma parte indisoluble; pero también hacía referencia al cuerpo que ven los demás, el que refleja el espejo –el de El Narciso- el que es susceptible de ser ‘retratado’. No obstante todas ellas acaban siendo diferentes visiones de una misma realidad.
¿Que extraño poder interior hace que sometamos a nuestro cuerpo al análisis escrutador de un artilugio que es capaz de inmortalizarlo emulando rituales que siempre estuvieron vinculados con el recuerdo y con el paso al más allá?
Era el ‘aura’ que acompañaba al individuo quien permanecía en el lugar mientras hubiera alguien que quisiera recordarlo. Un halo intangible que quedaba latente en la escena, irrepetible en el espacio-tiempo, que paralizaba un instante de su presencia.
Con la aparición de las ‘máquinas seriadas de reproducir instantes’ el aura ha acabado choteándose, al convertirse en algo asequible a todos los mortales. Desde entonces cambian los paradigmas, se prostituye la imagen...
¿O quizá no?
Paul Valery reflexionaba en sus planteamientos con respecto al cuerpo atendiendo al mismo como: máquina articulada formada por una estructura esquelética accionada por músculos a través de un sistema nervioso...; también se refería a ‘mi cuerpo’ como pertenencia a algo interior intangible del que forma parte indisoluble; pero también hacía referencia al cuerpo que ven los demás, el que refleja el espejo –el de El Narciso- el que es susceptible de ser ‘retratado’. No obstante todas ellas acaban siendo diferentes visiones de una misma realidad.
¿Que extraño poder interior hace que sometamos a nuestro cuerpo al análisis escrutador de un artilugio que es capaz de inmortalizarlo emulando rituales que siempre estuvieron vinculados con el recuerdo y con el paso al más allá?
Experimento aurático
En la congelación de instantes que se reproduce en el enlace de imágenes que se adjunta, se pueden observar ‘tres segundos irrepetibles’ de la vida de personajes que de forma voluntaria se han prestado a este ensayo de laboratorio; han querido, de forma consciente o inconsciente, registrar ‘su forma’ de interpretar un instante, una manera de inmortalizarse en este teatrillo. Son tres segundos que ya forman parte del pasado de todos ellos que jamás volverá a repetirse.
¿Tienen o no tienen aura estas manifestaciones inmortalizadas? ¿Tiene o no tiene aura la Marilyn seriada de Warhol? Yo creo que si... yo creo que no... aunque pensándolo mejor... aunque también podría...
Acción artística
¿Tienen o no tienen aura estas manifestaciones inmortalizadas? ¿Tiene o no tiene aura la Marilyn seriada de Warhol? Yo creo que si... yo creo que no... aunque pensándolo mejor... aunque también podría...
Acción artística
Te invito a que le eches una mano a la ‘Máquina aurática’ ayudándole a buscar argumentos a este comportamiento humano que puede que tenga algo de narcisista... o que no lo tenga... aunque también podría interpretarse que... en fin, es la escenificación de nuestra propia esencia interior, de esa ‘cosa’ que mueve a la máquina de Valery.
Cómo hacerlo
1. Haz un comentario al respecto en este blog.
2. Haz una visita a la ‘Máquina aurática’ que se encuentra expuesta en el Colegio Oficial de Arquitectos de Canarias (Santa Cruz de Tenerife) hasta el 19 de marzo, de lunes a viernes, de 11 a 13 h. y de 18 a 21 h. formando parte de la exposición colectiva ‘SOBRENADA’ organizada por la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de La Laguna y dicho Colegio, donde participan un total de 23 artistas.
3. Si deseas que tu aura –o lo que sea- quede inmortalizada por el autor del endemoniado artilugio, puedes hacerlo en dicha exposición en sesiones de tarde (de 18 a 21 h.) los días 13 y 14 de marzo.
Resultados de la investigación
2. Haz una visita a la ‘Máquina aurática’ que se encuentra expuesta en el Colegio Oficial de Arquitectos de Canarias (Santa Cruz de Tenerife) hasta el 19 de marzo, de lunes a viernes, de 11 a 13 h. y de 18 a 21 h. formando parte de la exposición colectiva ‘SOBRENADA’ organizada por la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de La Laguna y dicho Colegio, donde participan un total de 23 artistas.
3. Si deseas que tu aura –o lo que sea- quede inmortalizada por el autor del endemoniado artilugio, puedes hacerlo en dicha exposición en sesiones de tarde (de 18 a 21 h.) los días 13 y 14 de marzo.
Resultados de la investigación
Las series auráticas se irán exponiendo en el presente blog a medida que se vayan registrando. Inicialmente se visualizan en pantalla sólo cinco fotografías que la máquina elige de forma aleatoria. Para observar toda la serie debes de pinchar sobre cualquier imagen que te llevará al álbum donde podrás seleccionar la forma de visualizarlo.
